jueves, 8 de noviembre de 2007

Cul-de-sac

Si el nombre de este blog no fuese un sintagma promocional, bien podría llamarse “Callejón sin salida”. Cul -de- sac, como alguien me pintó una vez en la espalda de una camiseta. Porque eso es este blog. No sé si se habrán dado cuenta. No tengo enlaces y en mis sitios amigos sólo figuran dos direcciones, que responden exactamente al título, bajo el que se dan la mano. Podría decirse que he optado por llevarle la contraria a la mecánica de la blogsfera, que consiste en ir de una calle a otra, como si paseases por una gran ciudad. O bien he optado por ser un callejón como por el que una vez penetró Nancy, la de la tesis, (La tesis de Nancy, de Ramón J. Sender). A la entrada había un castizo sevillano que la saludó con un espontáneo:
-Hasta ahora.
Ella no supo a qué se refería el guasón, hasta que hubo de volver sobre sus pasos.
En el callejón sin salida el espacio está a medio camino entre lo público y lo privado. Los vecinos sacan las sillas a la calle, que es como prolongar la casa hacia fuera. Aquí me encontraréis, al fresco. Porque de todo tiene que haber. Y desde aquí me daré mis garbeos por ahí.

4 comentarios:

leo dijo...

¡Hola! Me ha gustado este callejón. Así que supongo que me dejaré caer alguna vez en mis paseos, con permiso de usted.
Un saludo.

JML dijo...

Me gustan los callejones, y este en particular es para traerse consigo una silla de tijera y sentarse a pegar la hebra. Después de haberle visto en tránsito por mi avenida, le devuelvo ahora la visita, complacido.

Un saludo

ingelmo dijo...

Pues como muy bien dices, yo he llegado hasta tu blog caminando de una calle a otra. Pero creo que he quedado atrapado en Cuentosdebarro quizás ¿para siempre?

Hasta ahora!

hombredebarro dijo...

Pues aquí estaré, amigos.