sábado, 5 de diciembre de 2009
Bob Esponja
qué densas flores qué pesadas estancias
y rancios besos de amante opaco
todo en usted trasciende como humo
que va por las nubes
amigo mío permítame que le aconseje algo de mundo
mire la tele y déjese de tratados
métase en el mar con un bañador de colores
y déjenos beber la blancura de sus pechos
peludos
el sol reflejado en su espejo retrovisor en un atasco
caminito de un pinar con compañía
la poesía de los poetas que se fijan en los colores de
los toldos no será consuelo suficiente para usted
ni el perfume de los jazmines
ni las ondas subacuáticas de un artefacto melódico
qué pesada herencia qué mortandad tan grande
le provoca ese legado
que tenemos que acuchillarle
pero si sigue todas nuestras instrucciones
se convertirá usted en un firme candidato
al puesto que todos desean
en el despacho de la FELICIDAD
Etiquetas: Relatos, Comentarios
Ahora sí que le he echado cara
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